_14 ¡PODEMOS! ¿QUEREMOS?

La erradicación de la pobreza extrema, hoy, es posible. Es una meta ambiciosa pero al alcance. La financiación necesaria es más pequeña de lo que muchos se imaginan: con 180.000 millones de $ al año sería suficiente. Esta cifra no llega al 0,3% del PIB mundial actual.

Es una cantidad casi cinco veces mayor que la que los países ricos dedican hoy a la erradicación de la pobreza a través de la AOD. Sin embargo, 180.000 millones de $ no suponen ni siquiera un 0,5% de su PIB conjunto.

La erradicación de la pobreza es, sobre todo, una cuestión de voluntad política. Si fuese una prioridad del conjunto de los gobiernos del mundo de manera permanente, pronto podría ser una realidad. Con los impuestos mundiales se obtendrían los recursos suficientes. Los países pobres tendrían que garantizar que quieren y saben hacer un uso adecuado de las donaciones recibidas.

¿Será la humanidad capaz de dedicar el 0,3% de su riqueza a afrontar el principal reto al que se enfrenta en este momento de su historia?